CENTRO CULTURAL SAN FRANCISCO SOLANO

Foto de Daniel

A mis nietos Kylian y Eder:

Amados, antes de que la Muerte, esa figura con la que jugáis sin saber nada de ella con espadas de juguetes de guerreros como el Cid Campeador o Atila, rey de los Hunos, venga a visitarme, y le dé un buen chasco diciéndole: -Llévate esa losa a otra parte; quiero recordar los buenos momentos vividos el verano pasado en Moradillo.

Sé que, el día de mañana, os dejaré un corto vacío, pues la Vida sigue, y no habréis nada entendido, marchando, yo, con el sentimiento de haberos defraudado en materia de amor y paz que tanto desprecio merecen por los hombres , que tienen por útil, conveniente y justo matar o asesinar al semejante y, más, si son mujeres.

Esto es así: la maldad procura revestir de diferente modo las mismas ideas.

Soy tan feliz con vosotros, que me jacto de ser vuestro abuelo.

Ahora recuerdo los días de mayo pasado, cuando, por las calles, cuadras y corrales, íbamos cantando esta canción popular:

Capullito de rosa que abres en mayo, guárdate de la noche que está nevando. Que está nevando, mi niño, que está nevando, capullito de rosa, que está nevando.” Aunque, ahora, hace tiempo que no nieva por culpa del Cambio climático.

¿Recordáis? El tío Flores, feliz de escucharnos, salía a nuestro encuentro, con el físico y moral de un burro, y comenzaba a rebuznar para infundirnos miedo, diciendo algo que vosotros no entendíais, y que yo refiero:

-¡Ay¡, ¡ay¡, ¡ay¡ La Virgen del Ejido cuide de mi huerta, que da poco fruto y no hay quien la quiera. Mañana cogeré el tractor y me iré pitando por los pueblos de alrededor, patentizando que no me arredra la miseria y, que si hace f alta, no privaré a los Asnos que nos gobiernan, de un insulto dado a tiempo.

De las noticias de la televisión y la prensa no os digo nada, porque vosotros andáis a vuestros juegos. Pero debo deciros, para que estéis sobre aviso, que de la lectura de noticias, ninguna buena, no quedaréis satisfechos, porque los hombres, en su hipócrita y obscena carrera, se dedican a matar o matarse entre ellos, teniendo la gloria de indicarnos el camino de la Muerte.

¡Feliz soy yo de estar con vida, y teneros como nietos ¡

Muchos besos.

DANIEL DE CULLA